Traqueotomía

Para una situación respiratoria garantizada. Le ayudamos en diferentes situaciones médicas.

Bases anatómicas y fisiológicas

Para entender las diferencias anatómicas específicas entre la traqueotomía y la laringectomía (extirpación de la laringe), es de especial importancia visualizar primero y conocer debidamente las vías respiratorias de una persona sana.

Las representaciones esquemáticas muestran que la tráquea y el esófago discurren muy próximos, con el esófago situado detrás de la tráquea. La laringe constituye un punto de intersección importante entre estas dos estructuras. No solo se encarga de la función fonatoria, sino también del direccionamiento correcto del aire y de los alimentos, así como de la protección frente a atragantamientos, por medio del cierre oportuno de la tráquea con la epiglotis durante la deglución. Una persona sana puede inspirar y espirar por la nariz y por la boca. Por consiguiente, en caso de obstrucción nasal, la función respiratoria adecuada también se puede mantener exclusivamente a través de la boca.

Diferentes enfermedades —como el deterioro agudo de la situación respiratoria hasta la ventilación, tumores graves en las vías respiratorias o enfermedades neurológicas— precisan de una traqueotomía o incluso la extirpación de la laringe (laringectomía).

En todos estos casos, se producen cambios anatómicos específicos, con consecuencias fundamentales en el estado de las vías respiratorias de los afectados.

 

Antes de la traqueotomía

  • Laringe presente
  • Esófago y tráquea intactos
  • Punto de intersección laringe
  • Fonación/direccionamiento/protección
  • Respiración oronasofaríngea

Tras la traqueotomía

  • Laringe conservada
  • Tráquea abierta
  • Respiración por el traqueostoma, eventualmente por la nariz
  • Traslado de la vía respiratoria a través del traqueostoma, en ciertas circunstancias reversible

¿Qué es una traqueotomía?

La traqueotomía es necesaria para asegurar la función respiratoria del paciente. Puede requerirse en el contexto de operaciones complejas en la zona facial, debido a una situación de emergencia o por una necesidad de ventilación previsible a largo plazo. Durante una traqueotomía, se abre la pared anterior de la tráquea para crear un acceso directo a las vías respiratorias inferiores.

En función del diagnóstico, se aplican diferentes técnicas que deben tenerse en cuenta posteriormente en la provisión de recursos y el cuidado del paciente. Como resultado de la traqueotomía, tanto la inspiración como la espiración se realizan a través del traqueostoma. La nueva vía respiratoria creada elude la laringe, lo que significa que inicialmente no es posible generar voz.

Las combinaciones especiales de recursos, como la cánula traqueal con válvula fonatoria, permiten reactivar en la mayoría de los casos la función fonatoria en una fase posterior del tratamiento.

Traqueotomía o traqueostomía

Sobre todo en los países angloamericanos, se utilizan los términos «tracheostomy» o «tracheotomy» para referirse al mismo procedimiento: la traqueotomía. En otros se ha establecido la distinción entre traqueotomía para designar la creación de una vía por sección de la tráquea y traqueostomía para la creación de un traqueostoma epitelizado.

Para el paciente, el cambio del espacio muerto (porción de las vías respiratorias no disponible para el intercambio gaseoso) tras la traqueotomía es inmediatamente perceptible en la primera respiración, al reducirse notablemente la resistencia respiratoria.

Aunque este efecto sea inicialmente positivo, es contraproducente por razones fisiológicas, ya que la resistencia respiratoria es importante para mantener el volumen y la función pulmonares. Las cánulas traqueales, a su vez, aumentan la resistencia, especialmente en combinación con un HME (Heat and Moisture Exchanger = intercambiador de calor y humedad).

Utilidad de la traqueotomía

Debe pasarse lo antes posible del uso de tubo endotraqueal para la ventilación a una traqueotomía con una cánula traqueal bien ajustada, que proteja la laringe y las cuerdas vocales.

De esta manera se facilita la higiene bucal y se prepara o permite la comunicación y la ingesta oral de alimentos. En varios aspectos, la traqueotomía en sí ofrece ventajas activas (vía respiratoria segura, buena aceptación de la cánula traqueal, escasa sensación de cuerpo extraño, alta seguridad de fijación, aspiración bronquial eficaz) y pasivas (menor cantidad de sedantes, mejor higiene bucal, rápida oralización, movilización precoz).

Las indicaciones clásicas para la inserción de un traqueostoma se producen en situaciones médicas muy diferentes:

  • Obstrucción mecánica de las vías respiratorias (edema, tumores, heridas, quemaduras químicas, cuerpos extraños)
  • Incidentes internistas (cardiológicos, neumológicos)
  • Enfermedades neurológicas, en caso de disfagia y riesgos de aspiración
  • Ventilación a largo plazo/deshabituación

Las complicaciones

En el contexto de una traqueotomía, son posibles diversas complicaciones que es imprescindible observar. En general, las hemorragias, las infecciones y granulaciones pueden causar problemas en cualquier momento. Entre las complicaciones particulares se incluyen: colocación incorrecta de la cánula, úlceras por presión en la zona de la punta de la cánula, neumotórax, lesiones en la pared traqueal por errores de la presión del manguito, fístulas esofágicas, cicatrices y estenosis de la tráquea.